Una cervecera internacional enfrentaba uno de los retos más importantes en el mercado actual: producir cerveza sin alcohol sin sacrificar el sabor, el cuerpo ni el perfil aromático característico de sus versiones tradicionales. A medida que crecía la demanda global de bebidas con bajo o nulo contenido alcohólico, también lo hacía la presión por mantener […]
Una reconocida empresa del sector lácteo enfrentaba el reto de aumentar su capacidad de producción de leche UHT (ultra alta temperatura) sin comprometer la eficiencia energética ni incrementar significativamente el consumo de recursos. Su objetivo era claro: producir más utilizando la infraestructura existente, minimizar la inversión en nueva planta y reducir el impacto ambiental.

Problemáticas detectadas:
- Límites en la capacidad de procesamiento sin alterar la configuración de planta.
- Necesidad urgente de incrementar el rendimiento diario de leche UHT para responder a la demanda creciente del mercado minorista y de exportación.
- Compromiso con objetivos de sostenibilidad ambiental, especialmente en el uso eficiente de energía y agua.
- Alta dependencia de equipos que consumían demasiada energía en procesos clave como la pasteurización y esterilización.
Solución implementada:
La empresa optó por integrar equipos de ingeniería avanzada, diseñados para procesos higiénicos y altamente eficientes, en su línea de tratamiento térmico de leche. La solución consistió en reemplazar módulos convencionales por nuevos sistemas con tecnología de separación centrífuga y recuperación térmica, capaces de mantener un flujo constante, minimizar pérdidas y operar con máxima eficiencia energética.
Resultados obtenidos:
- Incremento del 25% en la producción de leche UHT, sin necesidad de ampliaciones físicas mayores.
- Solo un aumento del 2% en el consumo energético, a pesar del crecimiento en volumen procesado.
- Reducción significativa del uso de agua en procesos de limpieza CIP y recuperación de calor.
- Optimización del espacio en planta y reducción de tiempos de mantenimiento.
Este caso demuestra que, con la selección correcta de tecnología y un enfoque orientado a la eficiencia integral del proceso, es posible resolver cuellos de botella en producción, alinearse a metas sostenibles y mejorar la rentabilidad operativa, sin comprometer la calidad del producto ni requerir grandes inversiones.
